
La hora del residente

dance hole
13/05/2020
Todo ha cambiado en apenas un mes. Las agendas de los grandes DJs internacionales han sido canceladas debido a la pandemia. La situación es compleja para promotores de festivales y propietarios de clubs y discotecas. Los medios de comunicación especializados empiezan a sufrir la crisis. El circuito internacional ha dejado de girar y se encuentra en situación de stand-by esperando a que alguien apriete de nuevo la tecla play.
El escenario es idóneo para que la burbuja creada en torno a la figura del DJ se desinfle. Hemos creado DJs por encima de nuestras posibilidades. La prohibición de viajar, la disminución del aforo en salas, la cancelación de festivales y la crisis económica auguran un cambio en sus condiciones de contratación y sus cachés. Algunos incluso volverán a ser humanos.
En un panorama de recesión la actividad económica se contrae, disminuye el consumo y la inversión.'Para invertir en este entorno debemos repensar las fórmulas que funcionaron en el pasado y adaptarlas a la nueva realidad; solo así podemos sobrevivir, primero, y rentabilizar, después', explicaba José María Díaz Vallejo, gestor del fondo Rentamarkets Narval al diario Cinco Días a finales de marzo.

Quizás sea un buen momento para recuperar la figura del DJ residente y volver a esas fórmulas que funcionaron en el pasado. Profesionalidad, experiencia, conocimientos, psicología. Volver a reconocer la figura del DJ local adaptada a la nueva realidad, aunque no a cualquier precio. El sector exige reducir la precariedad, estar sujeto a la legalidad y salarios que se ajusten al CV del profesional.
